Reproducido por TFP-Ecuador el 1 de febrero de 2023
Las revelaciones de Nuestra Señora del Buen Suceso a Sor Mariana de Jesús Torres tratan mucho sobre el papel de Ecuador y de América del Sur bajo el punto de vista de la Contra-Revolución. La Santísima Virgen hace profecías muy precisas al respecto de la Revolución en América del Sur, de la batalla entre revolucionarios y contrarrevolucionarios y de la victoria que Ella asegurará a estos últimos.
La Madre de Dios quiso aparecer y hacerse venerar bajo la advocación de Nuestra Señora del Buen Suceso, de la Candelaria o de la Purificación, apelativos referentes a un mismo episodio narrado en el Evangelio y contemplado en el cuarto misterio gozoso del Rosario.
¿Qué relación hay entre la Purificación y todo cuanto Nuestra Señora predijo a propósito de la Revolución y Contra-Revolución en la historia de América del Sur, del papel de este Continente en el mundo y, por fin, de la victoria de los contrarrevolucionarios?
En ese pasaje del Evangelio Nuestro Señor es llamado por el Profeta Simeón piedra de escándalo, o sea, de división, para que se revelen los pensamientos de muchos corazones.
Ahora bien, no hay duda de que la Contra-Revolución constituye una piedra de escándalo continua en nuestra época en que ninguna aberración escandaliza más. Sin embargo, ¿qué aplicación habría para estas palabras: “para que se revelen los pensamientos de muchos corazones”?
Consideremos que Simeón esperó la vida entera para ver al Mesías y, cuando lo encontró, discernió en Él que sería la piedra de escándalo y anunció esto con amor y entusiasmo, como siendo una de las misiones específicas de aquel Niño.
Nuestro Señor manifestó todo cuanto está en el Evangelio sobre los designios de Dios relativos a la salvación de los hombres. Sin embargo ¿de quiénes reveló Él los pensamientos?
Particularmente de los fariseos.
¿Y cómo lo hizo?
Denunciando y desenmascarando las intenciones de aquellos hipócritas que, a pesar de desagradarse con la predicación y la Persona del Divino Maestro, evitaban atacarlo públicamente, porque no querían revelar sus pensamientos. Por eso, venían con preguntas capciosas, tratando de conservar oculta la propia posición.
En nuestros días, aquellos que luchan por la Contra-Revolución son llamados a imitar al Divino Redentor especialmente a este título de piedra de escándalo y a asumir, mutatis mutandis, todas las luchas y sufrimientos que, en Nuestro Señor, culminaron en la Pasión, Muerte y Resurrección.
A mi ver, aquí está el nexo entre nosotros y la devoción a Nuestra Señora del Buen Suceso, que explica hacia dónde deben orientarse nuestros pasos y proyecta una luz sobre nuestra piedad.
En efecto, en los varios episodios de la vida del Salvador, debemos procurar contemplar cómo Él fue obligando que se revelasen los pensamientos. Por ejemplo, uno de los hechos más marcantes fue la resurrección de Lázaro. Después de este milagro espectacular, se manifestaron las intenciones de los fariseos que comentaron entre sí: “Es necesario matarlo”.
También cuando el populacho, instigado por los agentes del Sanedrín, prefirió Barrabás a Nuestro Se- ñor, se revelaron cuáles eran los pensamientos de esa gente. Y, por fin, en la Crucifixión de Jesús, una vez más ellos fueron revelados.
Así, del comienzo al fin, continuamente, Nuestro Señor Jesucristo se mostró como piedra de escándalo.
Entonces, nosotros podemos orar al Hombre-Dios, por medio de su Madre Santísima, diciendo: “Oh Divina Piedra de Escándalo puesta para la revelación de los pensamientos de muchos corazones, de los hipócritas y fariseos, tened piedad de nosotros y dadnos, por vuestros méritos infinitos, la fuerza que mostrasteis en esos lances de vuestra vida terrena”*
* Cf. Conferencia de 12/2/1982.