San José
San José era noble en su esencia, es decir, en su propia persona, porque en él encontramos la triple nobleza: fue justo en su alma, alcanzó la dignidad de esposo de la Reina del Cielo, y tuvo el oficio de padre nutricio del Hijo de Dios.
San José era noble en su esencia, es decir, en su propia persona, porque en él encontramos la triple nobleza: fue justo en su alma, alcanzó la dignidad de esposo de la Reina del Cielo, y tuvo el oficio de padre nutricio del Hijo de Dios.
Para tener alguna noción del semblante de San José sería necesario deducir, a manera de suposición, el carácter de un hombre que estuvo a la altura de ser el padre de Aquel cuya Sagrada Faz está estampada en el Santo Sudario de Turín. Es decir, el hombre que fue el educador, el guía, el protector … Leer más